¿Cómo es el lenguaje del bebé de los seis a los doce meses?
Los bebés a partir de los seis meses de edad, tienen una forma de comunicarse mucho más intencionada. Dejará de utilizar el llanto y empezará a usar la voz para llamar la atención. Aprenderá a sacudir la cabeza para expresar negación, señalará con un dedo aquellos objetos que desee y comenzará a decir adiós con la manita. Todos estos gestos simbólicos poseen una gran importancia ya que tienen la misma validez que las palabras.
Además, el lenguaje del bebé en estos meses se caracterizará por lo siguiente:
Imitación de sonidos
En todo lo que tiene que ver con la crianza y la educación del niño, sus padres son su mayor modelo a seguir. Lo mismo ocurre con el lenguaje. El bebé irá desarrollando esta faceta poco a poco imitando los sonidos que escucha de sus papás. En esta etapa, también será muy común que imite sonidos de animales (el ‘guau guau’ del perro o el ‘miau miau’ del gato) o de otros objetos o elementos (el ‘brum brum’ del coche o la moto, por ejemplo).
Lalación
El lenguaje del bebé de 6 a 12 meses está caracterizado por la lalación oel balbuceo. El niño empezará a repetir algunas sílabas (ma, gue, ta…), pero todavía no tendrán mucho sentido y serán difíciles de comprender. Si llega a emitir alguna palabra, estas serán muy simples y se producirán hacia los diez meses de edad: papá, mamá, agua, tete… Es probable que conozca y balbucee los nombres de los miembros de la familia.
Más comprensión que expresión
Antes que la capacidad de expresión, se desarrolla en el niño la capacidad de comprensión. Durante estos meses, el bebé reaccionará perfectamente a su nombre y, además, será capaz de entender unas 50 palabras de uso común, además de órdenes sencillas.
A la mayoría de los papás, les preocupa que el lenguaje de su hijo no se esté desarrollando correctamente. Es pronto para saberlo con claridad, pero sí deberías prestar especial atención a ciertas señales: si el niño no realiza ningún tipo de gesto para comunicarse, si es incapaz de comprender órdenes sencillas (‘dame el juguete’, ‘di adiós’, ‘da palmaditas’) o no emite ninguna sílaba o sonido, es recomendable que consultes con el pediatra o con un especialista de confianza.
Cosas puede hacer el bebé de 6 a 12 meses
Desarrollo y evolución
No solamente el lenguaje experimentará una evolución fascinante en estos meses, sino que tu hijo también desarrollará otras áreas:
Antes de llegar a los 9 meses, es probable que tu bebé haya aprendido a sentarse sin ayuda y que pueda permanecer en esta posición durante todo el tiempo que quiera. Además, es capaz de girarse estando sentado para mirar y coger objetos.
Otra de las cosas más características de esta edad es el gateo. No todos los bebés pasan por esta fase. Algunos sí lo hacen y otros, en cambio, en lugar de gatear experimentan otras formas de desplazarse como el ‘culeo’ o el ‘arrastre’.
El bebé comenzará a ponerse de pie y, alrededor de los 12 meses, comenzará a andar. Esta es una etapa muy bonita, pero también un poco estresante para los padres ya que hay que estar muy atento a los movimientos del niño para prevenir accidentes. Hay que tener en cuenta que es un todoterreno que desea explorar todo el mundo y ahora, andando, ha descubierto su forma autónoma de hacerlo.
Entre los 6 y los 8 meses, el bebé será capaz de coger objetos con el pulgar y la cara lateral del índice y cambiarlos de una mano a otra. Entre los 9 y los 12 meses ya utilizará la pinza pulgar-índice de forma correcta y aprenderá a dejar caer los objetos.
Justamente los 6 meses es cuando el niño comenzará a sentirse más inseguro y con miedo al ser apartado de los padres, esto se conoce como ‘ansiedad por separación’ y puede extenderse hasta los 2 años y medio.
6 ejercicios para estimular al bebé de seis a doce meses
Los ejercicios de estimulación que te proponemos son muy sencillos y ayudarán al bebé a ir conociendo el mundo que le rodea y a desarrollar sus habilidades motoras, sensoriales y cognoscitivas. Además, gracias a ellos, el niño podrá incrementar su vocabulario, ganar en autonomía y aprender a socializar.
- ¿Conoces el juego de la carretilla? Sujeta al pequeño por sus piernas y deja que camine con sus manos.
- Coge el juguete favorito de tu hijo y escóndelo debajo de una mantita. Ahora dile que lo busque quitando él solito el paño.
- Haz pompas de jabón y juega con tu bebé a explotarlas: con la mano, con el pie, con el cuerpo… ¡Este juego apasiona a los niños y tiene muchos beneficios!
- Si tu hijo ya ha aprendido a gatear, ponle algunos obstáculos como pequeños cojines o toallas para que tenga que gatear por encima. ¡Siempre con mucho cuidado, claro!
- Canta canciones a su lado de diferentes temáticas: transportes, animales, las partes del cuerpo… También puedes contarle cuentos muy sencillos. De esta forma, irá desarrollando su lenguaje más fácilmente, se divertirá y su cerebro irá almacenando toda la información. A la larga, verás como empieza a tararear e incluso a pedirte que lo repitas una y otra vez.
- Otra opción que les causa mucha curiosidad son las cremas de colores, por lo que una espuma de afeitar y colorantes vegetales son una opción para estimular su parte sensorial principalmente y cognoscitiva, al mezclar la espuma y ver que poco a poco sale algún color los llena de emoción.