La lactancia materna exclusiva
La lactancia materna exclusiva es la alimentación que se le suministra al lactante mediante leche materna sin ningún otro suplemento sólido o líquido, incluyendo el agua y formulas, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Las sociedades médicas recomiendan este tipo de lactancia durante los primeros 6 meses de vida.
Beneficios que aporta la leche materna
La leche materna es el alimento más adecuado para las necesidades del bebé, por encima de cualquier complemento de leche artificial.
¿Por qué es tan importante?
Porque la composición de la leche materna varía según el momento del día, durante la propia toma y según va creciendo el bebé, adaptándose de la mejor forma posible a las necesidades del lactante en cada fase de su desarrollo.
Esta adaptación se intenta imitar con las leches artificiales. Pero a pesar de los avances en este aspecto, la leche materna es superior también en la adaptación fisiológica.
La importancia de la nutrición hasta los 6 meses
Las necesidades del bebé han variado a los 6 meses de edad y precisa la complementación con otros alimentos sólidos y líquidos.
La alimentación no será con leche materna de forma exclusiva, sino que precisará de complementos alimenticios.
Hay que tener en cuenta que a pesar de introducir nuevos alimentos en la dieta del lactante, la leche sigue siendo su principal nutriente. Los organismos médicos recomiendan mantener lactancia materna hasta los 2 años.
Estadísticas
Lamentablemente se estima que menos del 40% de los lactantes en todo el mundo reciben leche materna como alimento exclusivo. Según la OMS, si todos los recién nacidos fueran amamantados en la primera hora de vida, y esta lactancia se mantuviera hasta los 6 meses de forma exclusiva y de forma complementaria hasta los dos años, podrían salvarse al año 800.000 vidas infantiles.
Existe gran cantidad de evidencia científica sobre los beneficios de la lactancia para el recién nacido, aunque no debemos olvidar los beneficios maternos que también existen. La Asociación Española de Pediatría considera la leche materna superior a cualquier otro alimento para la nutrición y el desarrollo del bebé en los primeros meses, apoyándose en la evidencia de numerosos estudios científicos.