Si las mujeres tienen uno o más factores de riesgo de trombosis además del sobrepeso, se recomienda la profilaxis farmacológica de la trombosis, que debe continuar hasta seis semanas después del parto. ¿Qué pasa con el sobrepeso y la diabetes en el embarazo?

Al final del embarazo, se debe informar a la mujer que exceder la fecha estimada de parto puede ser peligroso para el niño. En el caso de factores de riesgo adicionales, posiblemente podría ofrecerse una introducción a partir de la semana 39 de embarazo, explicó el ponente. 

Sin embargo, esto requiere dosis más altas de oxitocina y prostaglandinas. Al mismo tiempo, las posibilidades de éxito parecen menos favorables. Esto explica, entre otras cosas, la tasa significativamente más alta de cesáreas en relación con la obesidad.

El sobrepeso y diabetes en el embarazo están generalizados en todos los grupos de edad. Cada vez menos adultos tienen un peso normal. Las mujeres embarazadas también tienen cada vez más sobrepeso u obesidad y son cada vez más propensas a tener diabetes gestacional. 

Un peso normal durante el embarazo protege contra complicaciones

Cada vez más mujeres embarazadas tienen sobrepeso en el primer examen. De acuerdo con las evaluaciones federales anuales de obstetricia, en 2017 casi el 40% de las mujeres embarazadas fueron clasificadas con sobrepeso durante el examen inicial, en 2007 la cifra fue del 34%. 

Los datos del microcenso muestran que las mujeres mayores tienen más sobrepeso al comienzo del embarazo que las más jóvenes.

 Esto tiene consecuencias para la madre y el niño

Para la futura madre, la obesidad y la diabetes durante el embarazo se asocia con un mayor riesgo de hipertensión y preeclampsia, y con un mayor peso al nacer y un posterior riesgo de obesidad en el niño. 

El aumento excesivo de peso durante el embarazo también aumenta el riesgo de enfermedad cardiovascular, diabetes mellitus tipo 2, presión arterial alta y síndrome metabólico del niño”.

La prevención temprana es crucial

La epidemia mundial de sobrepeso y obesidad sigue planteando grandes desafíos para el mundo. Las medidas para la prevención temprana en las áreas de nutrición, actividad física y cambios en el estilo de vida deben seguir siendo el foco para prevenir la nutrición. 

Las enfermedades relacionadas y las enfermedades asociadas mitigan las consecuencias sociales y económicas. El peso normal antes y durante el embarazo es un factor crucial para la salud tanto de la madre como del niño. Las deficiencias en la educación sobre nutrición en la primera infancia y la escuela deben contrarrestarse con medidas preventivas situacionales y conductuales apropiadas.