Durante el embarazo, el cuerpo de una mujer experimenta numerosos cambios, incluidos aquellos en la vulva. Es importante entender estos cambios para afrontar el proceso con confianza y bienestar. Este artículo aborda cómo y por qué ocurre esto.

Cambios hormonales y su efecto 

El embarazo desencadena un aumento significativo en los niveles hormonales, especialmente de estrógenos y progesterona. 

Estos cambios hormonales afectan el flujo sanguíneo en la región genital, lo que puede hacer que la vulva se vea más hinchada o sensible.

Aumento del flujo vaginal 

Durante el embarazo, muchas mujeres experimentan un aumento en el flujo vaginal. Este flujo puede volverse más claro y húmedo, lo que es normal y ayuda a prevenir infecciones. 

Sin embargo, es vital que las mujeres estén atentas a cualquier cambio inusual en el color o el olor que puedan indicar un problema.

Cambios en la piel 

La vulva también puede experimentar cambios en la pigmentación, en especial en la línea media del abdomen y en los labios. 

Esto se debe a la acción de las hormonas y generalmente es temporal. La piel puede volverse más sensible y propensa a irritaciones.

La elasticidad y el parto 

A medida que avanza el embarazo, los tejidos de la vulva y la vagina se preparan para el parto. 

El aumento del flujo sanguíneo y los cambios hormonales ayudan a aumentar la elasticidad. Esto es fundamental para facilitar el paso del bebé durante el parto.

Preparación para el posparto 

Es importante que las mujeres sepan que, tras el parto, su vulva pasará por un proceso de curación. 

Puede haber moretones o dolor debido a la presión durante el nacimiento. Comprender que estos cambios son temporales y naturales puede aliviar preocupaciones durante la recuperación.

Consejos para el cuidado durante el embarazo

• Mantén una higiene adecuada y suave en la región vaginal.
• Usa ropa interior de algodón para permitir una buena ventilación.
• Consulta con un médico cualquier cambio inusual en la vulva.
• Aplica cremas hidratantes si la piel se siente seca.
• Realiza ejercicios de Kegel para fortalecer el suelo pélvico.

Los cambios en la vulva durante el embarazo son naturales y reflejan la adaptación del cuerpo a nuevas funciones. Comprender estos cambios puede ayudar a las mujeres a aceptar su cuerpo y a cuidar de su salud durante esta etapa transformadora.